El recientemente elegido presidente de la FIFA, Gianni Infantino, se puso un uniforme deportivo y disputó un partido de fútbol amistoso con estrellas del balompié como Deco y Figo.
El encuentro se realizó en la sede de la FIFA, en Zúrich, y tuvo como objetivo cambiar la imagen de la institución, marcada por escándalos de corrupción en los últimos meses.
Jugo y Compartió con jugadores
Entre los jugadores que disputaron el partido estuvieron Carles Puyol, Andrei Shevchenko, Robert Pires, Clarence Seedorf, Paolo Maldini y Fabio Cannavaro. Ambos equipos que disputaron el partido estaban compuestos por hombres y mujeres, como señal de la voluntad de la FIFA por la inclusión femenina en estas disciplinas.
El entrenador italiano Fabio Capello y el jeque Salman, derrotada en las elecciones para elegir al presidente de la FIFA, también formaron parte de los equipos que disputaron el partido.
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